Capítulo 2 — Invierno (Mitad Frontal)

Estoy viendo un mundo color plata.

Las vacaciones de primavera son en marzo… pero aún así, era raro ver grandes cantidades de nieve en esta área.

Casi podías decir que no era natural.

Las hermanas Yagami estaban caminando en ese mundo color plata, en donde todo estaba muy brumoso debido a toda la nieve acumulada.

La más joven de las hermanas Yagami, Tama, estaba dando vueltas mientras decía; “Waii~~ Waii~~~”. Pero entonces, volteó hacía mi dirección.

—¿……?

Tama ladeó su cabeza y entrecerró los ojos como si fuera un rufián, mirándome fijamente.

—¿Pasa algo, Tama?

Kagami solo estaba usando su uniforme, a pesar de que estaba nevando… en cualquier caso, le dirigió a Tama una mirada perpleja.

—Mmm, puede que solo sea la imaginación de Tama —Tama se veía un poco preocupada, pero luego abrió la boca, sacó la lengua, y comenzó a atrapar la nieve. Eso no es muy higiénico…

—Detente. Es asqueroso.

Kagami entrecerró sus ojos debido al extraño comportamiento de su hermana y la regañó, actuando como una hermana mayor.

—Además, pon atención en donde estás caminando. Supongo que no habrá muchos autos en las calles con un clima como este… pero te convertirás en una gran monstruosidad si comienzas a caminar en medio de la calle con tu gran y obstructivo cuerpo.

Kagami asomó su cabeza por fuera del paraguas con estampado japones y miró hacía el cielo, el cual enviaba nieve sin cesar.

—Este clima es horrible… ¿por qué tenemos este tipo de clima aquí y en esta temporada del año? Algo se siente muy poco natural en todo esto… es posible que sea el trabajo de una alteración. Aunque tal vez solo sea este ocurriendo en esta zona… pero tal vez…

—Funyaa —Kagami se veía un poco cansada después de decir todo eso en voz alta, y bostezó.

—Sasami-san posee el poder del Dios Supremo, y está muy deprimida en estos momentos, por lo que es posible que su estado tenga una influencia en el mundo. De acuerdo a la leyenda, cuando la Diosa del Sol Amaterasu cayó se deprimió, se encerró en el Ama-no-Iwato, y durante ese tiempo, el mundo se hundió en la oscuridad… es decir, llegó el invierno. Amaterasu tenía ese tipo de disposición, en otras palabras… ¡¿gfahhh?!

La bola de nieve de Tama golpeó a Kagami justo en medio de la cara, interrumpiendo sus serios pensamientos.

—Kyahahaha~~~

Tama dejó escapar una triunfante e inocente sonrisa mientras comenzaba a hacer otra bola de nieve con sus cálidas manos.

—¡Kagami-nee se preocupa demasiado~~~! ¡Es nieve! ¡Tama nunca había visto tanta nieve, solo en la tele! ¡Tengamos una pelea de bolas de nieve! ¡Luego Tama quiere hacer un muñeco de nieve!

Tama puso sus dos manos en frente de ella mientras veía como la nieve se compactaba y se derretía en sus manos, como si hubiera encontrado algún tipo de tesoro.

—¡Tama aaama la nieve! ¡Está fría y hace que todas las cosas cálidas desaparezcan, pero es linda! ¡Tama no cree que sea bueno que nieve todos los días, pero es bueno algunas veces! ¡Me gusta cuando se acumula! La naturaleza es grandiosa… ¡como esa vez que el mundo se convirtió en chocolate, ahora parece que el mundo entero estuviera hecho de pequeños trozos de hielo!”

Tama continuó diciendo cosas sin sentido, antes ponerse rígida como un tronco.

—Ah… fuwaah…

De repente llevó su mano a su boca, y sus hombros comenzaron a temblar.

—¡Kushami!

—¿Eh? ¿Qué acabas de hacer?

—¡Kushami! ¡Kushami!

—T-Tama, tus estornudos literalmente suenan como la palabra ‘kushami’. Normalmente los estornudos suenan como ‘achooo’ o algo similar a eso, ¿no…?

—¿Hm? Tama no lo hace así… hnn… hah… ¡kushami!

—Funyaaa~~…

La frígida expresión de Kagami se derritió como la nieve y se convirtió una gentil sonrisa. De la nada, parecía estar cautivada por su hermana menor, Tama, por otro lado, comenzó a limpiarse los mocos que ahora goteaban de su nariz.

—Cuando estornudas, suenas casi como un animal… es maravilloso… es como si hubiera encontrado una extraña criatura… de repente Tama se ve mucho más linda…

—¿? ¿Tama es linda? Ehehe… ¡¿Kyahhh?!

Kagami tenía bolas de nieve en ambas manos y comenzó a arrojarlas ferozmente a su hermana menor.

—¡Más! ¡Estornuda más, Tama! ¡Cae presa de todas estas bolas de nieve, resfriate, y luego vuelve a estornudar con esa linda voz!

—¡Ow! ¡¿Ow, owow?! ¡Las bolas de nieve duelen más de lo que Tama había pensado! ¡Kagami-nee es muy fuerte, deja de lanzar esas bolas de nieve tan fuerte! ¡Recuerda lo de Pearl Harbor!

Mientras las dos hermanas jugaban, alguien se arrastraba detrás de ellas…

———

—Ufufu. Parece que se están divirtiendo~~.”

———

Era una linda chica que parecía haber salido de un anime infantil. Hablaba con una voz amable y agradable.

Sonaba igual a una princesa de un cuento de hadas.

—……

—……

Kagami y Tama dejaron su kyakya-ufufufu de inmediato y miraron a la persona que estaba detrás de ellas. Kagami tenía una expresión mortalmente desagradable en su rostro, mientras que Tama parecía estar un poco perdida.

Era la mayor de las Hermanas Yagami, Tsurugi.

Pero estaba actuando extraño.

Esta mercantil chibi sensei normalmente se comporta como un hombre de mediana edad con la apariencia de una pequeña niña… pero justo ahora estaba actuando completamente como una niña.

Se tambaleaba de un lado a otro mientras caminaba, y el indicio normal de deliberada malicia estaba ausente en su rostro. Estaba abrigada y su aliento se tornaba blanco en frente de ella. Honestamente, parecía ser un cachorro que querrías proteger.

A Tsurugi no parecía importarle las sospechosas miradas que recibía de sus hermanas y en cambio, miró la nieve con brillantes ojos.

—La nieve es buena… apesta y hace que todo desaparezca… como el odio… —Tsurugi comenzó a murmurar.

.Tama se veía un poco asustada, volteó a ver a Kagami con los ojos llenos de lagrimas.

—U-Umm, Kagami-nee…

—No te preocupes por ella, Tama. Me gustaría creer que es una enfermedad pasajera… así que dejémosla en paz.

Kagami se veía un poco inquieta, extendió sus manos y estiró las mejillas de su hermana mayor, como si estuviera probando si era real o no.

—Nee-san ha estado extraña desde que siguió a la Ame-no-Murakumo al inframundo… ¿Tal vez algo salió mal cuando revivió en este plano, o tal vez algo pasó mientras estuvo atrapada en el inframundo…?

—¿Tsu-Tsurugi-nee está rota? ¿Tal vez se arregle si Tama la golpea?

—No estoy muy segura de la causa de este error en su programación, no deberíamos hacer nada hasta que diagnostiquemos el problema. No es que le este causando daño a alguien, muy aparte de ser molesta, por el momento, debemos vigilar..

Kagami suspiró profundamente y rápidamente comenzó a caminar.

—Más importante… tenemos que resolver el problema de Sasami-san en estos momentos. Todavía hay muchos detalles que desconozco… por ahora, he invitado a sensei a un restaurante familiar, hablaremos de eso allí.

Kagami señaló el letrero del restaurante familiar que estaba visible en frente de ellos. Parece ser que el restaurante sigue abierto a pesar de toda esta nieve.

Tama y Tsurugi se acurrucaron junto a Kagami.

—Tama está hambrienta~~~ ¡Hey, Kagami-nee, Tama quiere comer hamburguesa!

—¡Kagami-chan, quiero un poco de omurice!

—Cállense…

Kagami se sacudió cruelmente a sus hermanas y rápidamente caminó en línea recta hacía el restaurante.

—Por ahora, me gustaría encontrar un lugar cálido para descansar. Si accidentalmente me quedo dormida, me terminaré muriendo de frio, y es muy molesto para mi no poder disfrutar mis siestas.

@@@@@@

Estaba cayendo tanta nieve que ya se estaba acumulando afuera, por lo que no era de sorprender que hubiera pocos clientes en el restaurante.

Con las mejillas enrojecidas por el calor artificial que provenía del calentador, Kagami sacudió la nieve del cabello y la ropa de Tama, quien no dejaba de hacer ruido por todo el lugar.

“¡Bienvenidos! ¿Mesa para tres?”

Kagami miró a la camarera que había venido a recibirlos y habló a secas.

—Mi nombre es Yagami, y estoy aquí por una reunión. Con sensei… umm, un hombre llamado Tsukuyomi, ya debió haber llegado. Es una persona con un aspecto sospechoso que siempre está cubriendo su cara…

—Por aquí~~~.

Ah, parece que la camarera la entendió.

La camarera comenzó a guiar a las hermanas a través del restaurante con la mejor sonrisa de camarera que podía poner. Tama sonreía ampliamente ante los agradables aromas que flotaban en el aire y comenzó a hablar en voz alta.

—Howawawa… está tan cáááááálidooooo~~~ hace mucho frio afuera, y Tama pensó que se resfriaría… ¡la nieve da mucho miedo!

—Debiste traer un paraguas. Te lo ofrecí, pero estabas decidida a ‘hacerte amiga de la nieve’ o una cosa ridícula como esa. Además, deja de hacer tanto ruido en medio del restaurante, por favor.

—Kagami-nee siempre se está quejandooo~~~ Las orejas de Tama se van a caer~~~. ¡Ah, allí está! ¡Kagami-nee, por aquí, por aquí! ¡¡Es paparin!!

Parece que Tama ignoró completamente las instrucciones de Kagami de dejar de hacer tanto ruido y agitó las manos frenéticamente.

Estaba mirando hacía… un asiento en el área de fumadores, el mismo asiento que la camarera estaba señalando..

El asiento estaba envuelto en un humo gris, con mi hermano en medio de él. Estaba tendido sobre la mesa como si estuviera completamente muerto.

Kagami caminó hacía la mesa. “Uwah. Está muerto”, dijo con una mirada de disgusto en su rostro.

Un cenicero estaba al lado de mi hermano, y estaba lleno hasta el tope de colillas de cigarrillos.

—¿Se-Sensei? ¿Estás bien?

Mi hermano se veía tan desgastado que incluso Kagami parecía estar realmente preocupada.

Kagami sacudió a mi hermano por el hombro, y empezó a quejarse con su cara aún sobre la mesa.

—…Han pasado treinta y cuatro horas desde que hablé con Sasami-san… han pasado setenta y seis horas desde que toqué a Sasami-san… han pasado ciento veintisiete horas desde que tomé un baño con Sasami-san… Sasami-san… Sasami-san…

Era como ver a un drogadicto con síndrome de abstinencia.

—Uwah…

Kagami parecía rechazar completamente a mi hermano. Justo en ese momento, mi hermano finalmente notó que no estaba solo, y lentamente levantó su cabeza (logrando ocultar su rostro con ambas manos) y miró a Kagami.

—Sasami… san,,, Sasami… san… ¿Sasami-san…?

—U-Uhh… desafortunadamente, no soy Sasami-san.

Kagami y yo teníamos físicos similares, por lo que mi hermano parecía estar alucinando que estaba ahí. De repente saltó… ¡y envolvió a Kagami con sus brazos!

—¡Sasami-san! ¡Tenía tantas ganas de verte!

—¡¿Gyah?!

“¡Sasamisansasamisansasamisan! ¡Sasami-san nunca abandonaría a su pobre onii-chan, ¿verdad?! A-Aaaa… es el olor de Sasami-san, el calor de Sasami-san, la piel de Sasami-san… ¡Sasami-san, te amo! ¡Te amo!”

—¡¡Gyah!! ¡¡Gyah!! ¡¡Gyah!!

Atrapada por el agarre mortal de mi hermano, Kagami trató desesperadamente de alejarlo, pero fue en vano.

Al ver a su hermana así, Tama puso una mano en su cadera y apuntó con la otra, con una mirada presumida en su cara.

—¿Ves? ¿Veees~~~? Kagami-nee… no deberías hacer tanto ruido en el restaurante, ¿verdad? ¿Verdaaad~~~? ¡Y tu regañaste a Tama, hmph! ¡Kagami-nee, eres una chica mala! Ehehe~~~

—Deja de ser tan idiota y a-… ¡ayúdame!

Kagami despiadadamente colocó su codo en la cabeza de mi hermano y luego retrocedió, temblando, como si acabara de encontrarse con un asesino en un callejón oscuro.

—Senseii… e-eres un i-idiota…

Estaba llorando un poco.

—¡Tama se va a sentar al lado de Paparin! —Tama gritó y luego se dejó caer en su asiento. Tsurugi ya se había sentado en el asiento opuesto a mi hermano y estaba mirando el menú.

Todos estaban metidos en lo suyo, ¿no…?

Kagami dejó caer sus hombros antes de acercarse a Tama y comenzar a quitarle el abrigo.

—No tienes que usar toda esta ropa pesada en interiores, ¿verdad? El restaurante tiene calefacción, y es posible que sientas mucho calor con esto. Además, tus modales en las mesa siguen siendo bastante horribles, y podrías ensuciarte… nee-san, puedes quitarte la ropa sola, ¿verdad?

—¡Ufufu, por supuesto!

Tsurugi comenzó a quitarse la ropa como si fuera la cosa más natural en el mundo. Y por su ropa, me refiero a toda su ropa.

No fue solo su abrigo… Tsurugi también se estaba quitando todas las cosas que realmente deberías usar como un miembro funcional de una educada sociedad.

Se quedo en topless.

—¡Hey, tú! ¡Detente!

Kagami había estado preocupada por Tama, pero ahora corrió hacia Tsurugi y la golpeó en la cabeza.

—¡A menudo te digo que dejes de hacer cosas que puedan meterte a la cárcel! Además, en momentos como estos deberías estar molestándonos, y por eso baje mi guardia, pero… ¡¿por qué sigue completamente intacto tu lado pervertido?!”

—Kagami-chan… lo he estado pensando. Siento que todos tienen una parte importante de si mismo que define su propio ser. Para mi, esa parte probablemente sea mi parte pervertida…

—Nee-san, eso sobrepasa el reino del ‘infortunio y va directamente al reino de lo ‘lamentable’…

—…De todas formas, ¿deberíamos ordenar algo? Kagami-san… por favor, también siéntate…

Al parecer todo el ruido trajo devuelta a mi hermano a sus sentidos, y llamó débilmente a Kagami.

—Yaay~~.

Tama abrió el menú con su usual inocencia infantil, y luego comenzó a tirar de la ropa de mi hermano.

—Paparin, ¿qué significa esta palabra?

—Ah, esa es ‘almeja’. Y esta es ‘lenguado’. Y aquí dice ‘abalone’.

—Funyaa.

Kagami se estaba colocando una toalla humeda en su frente para enfriarse, antes de abrir un menú y comenzar a leer.

—Es bastante agradable no tener que cocinar, pero por alguna razón, también me hace sentir un poco sola…

—¡Paparin, paparin! ¡Tama quiere hamburguesa! ¡La hamburguesa es de Tama! ¡Ham-Tama!

—Por favor, cálmate, Tama-san Ah, creo que la comida para niños viene con una hamburguesa y un juguete. ¿Que tal si pides ese?

—Howawawa… Tama quiere ese juguete… pero, Paparin, por alguna razón, cuando Tama ordena la comida para niños, la camarera le dice a Tama que es un adulto y no la deja…

Bueno, no es para sorprenderse.

—Tama-chan, ordenaré la comida para niños por ti.

Tsurugi le mostró a Tama una amable sonrisa.

—Pero a cambio, ordena el omurice por mi, ¿de acuerdo? ¿Es un trato? Y luego podemos cambiarlo. Me veo como una niña de primaria, es probable que me dejen pedir la comida para niños.

Era raro. En el pasado, Tsurugi siempre se enojaba cuando la gente la trataba como una niña…

@@@@@@

Eventualmente, todos ordenaron lo que querían.

—Bueno, permítanme resumirles la situación.

Kagami se tambaleaba de un lado a otro por el sueño mientras iniciaba la conversación.

—En estos momentos, podemos separar nuestros actuales problemas en dos temas principales

Kagami levantó dos dedos, como si estuviera haciendo el signo de la paz.

—Por supuesto, existe la posibilidad de que estos dos temas estén conectados y se hayan originado en el mismo lugar, pero por el momento dejemos de lado esa hipótesis. Primero, hay un problema que realmente no me importa mucho actualmente: ¿Por qué la programación de nee-san parece estar fallando?

—¿Yo?

Tsurugi le dio un sorbo a su agua fría y ladeó su cabeza de forma linda.

Después de eso, comenzó a retorcer su cuerpo como si estuviera luchando contra algo.

—Hnngh, Kagami-chan… ¿vas a seguir diciendo que estoy rota o que estoy descompuesta o ese tipo de cosas? Mi personalidad siempre ha sido así, ¿no?

—Voy a ignorar tus molestas preguntas por el momento. En cualquier caso, permitanme explicarles algunas suposiciones que hice… es posible que nee-san se haya debilitado de alguna forma cuando regresó a este plano del inframundo, y algún tipo de desorden emergió en su psique. Además hay una posibilidad de que la sacerdotisa Tsukuyomi haya contaminado y distorsionado su psique de alguna forma…

Kagami comenzó a quejarse mientras miraba a su hermana que estaba actuando un poco rara. Tenía una ligera preocupación en sus ojos.

—En cualquier caso, estoy convencida de que nee-san actúa así debido a los eventos del otro día. Es como si hubiera cambiado de lugar con otra persona, o más bien, que ha perdido parte de sus recuerdos… o que haya retrocedido a un estado infantil… al menos, eso es lo que siento.

—¿Tsurugi-sensei era así en el pasado?

Mi hermano preguntó con una mirada confusa en su rostro, pero Kagami lo negó sacudiendo su cabeza.

—No lo sé. Tanto Tama y yo solo hemos conocido a nee-san por unos años… cómo eran las cosas antes es un completo misterio.

Kagami se veía un poco molesta por la situación.

—Le pregunté, y parece que nee-san ha conservado todos sus recuerdos y personalidad, pero solo de la época en la que era era el Dios Supremo Amaterasu. Por eso dije que se sentía como una perdida de memoria. Como si la mayoría de sus recuerdos se hubieran desvanecido por completo.

Pérdida de memoria.

Esta era la Tsurugi de hace mucho tiempo… de mucho antes que rescatará a Kagami de esa organización malvada, de mucho antes de que hiciera a Tama para servir como un dios de la siguiente generación, de antes que las bautizaran como las tres hermanas Yagami.

—Ya veo…

—Voy por unas bebidas~~~ —Tsurugi probablemente iba al mostrador de bebidas ya que realmente no podía contribuir mucho a esta conversación. Mi hermano la vio retirarse con fuertes emociones en sus ojos y comenzó a murmurar.

—Ya veo… Tsurugi-sensei era tan inocente en ese entonces… se siente un poco extraño ya que estoy acostumbrado a que Tsurugi actúe como un hombre de mediana edad, pero se ve bastante inocente de esa forma, o tal vez como una linda chica normal.

—Bueno, en realidad es una anciana que ha vivido durante mucho tiempo, por lo que es natural que sus experiencias hayan deformado su personalidad. Aunque, de acuerdo a los mitos, el Dios Supremo Amaterasu era bastante temperamental, fácil de ofender, y consentida por sus parientes, por lo que incluso en los viejos tiempo, actuaba como una mujer joven.

—¿Hm? ¿Que qué? ¿Estamos hablando de mi?

Tsurugi volvió cargando una bandeja con cuatro bebidas en sus pequeñas manos, y se las dio a las personas de la mesa con una sonrisa.

—Aquí tienen, chicos. Traje diferentes tipos de bebidas, así que elijan la que más les guste~~~.

—…

Kagami parecía estar de mal humor, pero aun así, tomó la bebida más cercana a ella.

—Bueno, comparada con la nee-san indisciplinada, malhumorada y mal educada, es verdad que esta nueva nee-san puede describirse como alguien más ‘linda’. Pero al final, debo decir que prefiero l— ¡¿¡¿pffuuuuhh?!?!

Kagami escupió su bebida.

—¡Qué sabor tan horrible! ¡Nee-san, ¿qué rayos le pusiste a esta bebida?!

—Ahahaha~~. ¡Kagami-chan obtuvo el premio gordo! ¡Es mi patentada y especial ‘Mezcla de Tsurugi’, elaborada y probada con esmero para saber peor que el vómito! ¡Teme a su poder, ahaha~~~!

—¡Maldita bruja! Me arrepiento por haberme preocupado por ti… ¡ugh! ¡Perdiste tus recuerdos, pero la mocosa traviesa de tu interior sigue viva y coleando, ¿verdad?! Voy a golpearte la cara, no te muevas!

—¡Fuhaha! ¡Kagami-chan, vas a necesitar mucho más entrenamiento si quieres enfrentarte a tu hermana mayor! Toma esto, la súper increíble habilidad secreta del Supremo Dios Amaterasu… ¡Ama-no-Iwato!

Tsurugi se metió descortésmente bajo la mesa, evadiendo los intentos de Kagami por agarrarla.

No había malas intenciones en su comportamiento; tan solo eran actos puros e inocentes.

—Pequeña… ugh.”

Kagami se limpió la boca con una servilleta mientras gruñía amenazadoramente.

—Bueno, nee-san siempre ha sido inteligente, y por eso estoy segura de que lo resolverá sin que tengamos que preocuparnos. Su situación tampoco parece ser demasiado urgente… y para ser franca, esta muy abajo en la lista de prioridades.

—Ahhh, Kagami-chan, así que estás preocupada por mi, ¿no? Siempre supe que era verdad… Kagami-chan es una buena chica.

Los ojos de Tsurugi brillaban a medida que se sentaba sobre sus rodillas y abrazaba la cabeza de Kagami, acariciándola.

Kagami no se veia muy feliz con eso y empujó a Tsurugi antes de cambiar de tema.

—Más importante, hay un problema más grande en este momento… y estoy hablando de Sasami-san.

@@@@@@

La camarera les trajo su comida a todos, y la conversación continuó mientras comían.

—Por favor miren esto.

Kagami tomó el vaso de agua fría antes de derramarlo sobre la mesa.

El agua transparente no se derramó por todas partes, sino que formó un círculo perfecto.

Y algo apareció en medio de esa masa de agua redonda con forma de espejo.

Era una vista panorámica de la ciudad.

—Esta es la ciudad en la que vivimos, la Ciudad Ame-no-Nuboko. La nieve puede dificultar las cosas, pero la Academia Konohana Sakuya esta por acá, y por aquí vivimos, en el Corpse Ahakihara, y la casa de sensei y Sasami-san… está por aquí.

Kagami apuntó hacia la vista de la ciudad que aparecía en el agua.

Pero cuando apuntó a nuestra casa en el agua… todo lo que podías ver era oscuridad.

Un gran círculo negro colgaba sobre nuestra casa.

Que todo lo demás en la imagen se viera como una ciudad normal hacía que este circulo negro del tamaño de una montaña fuera aún más surrealista.

—¡Waahh! ¡Es muy redondo! ¡Y muy negro!

Tama dijo sus impresiones.

—Lo es, ¿no? —Kagami hizo a un lado el comentario de Tama sin esfuerzo y continuó.

—De acuerdo a nee-san, este círculo negro es la Ama-no-Iwato. Es algo así como una barrera que se forma cuando el Dios supremo Amaterasu corta lazos con el mundo exterior y se aísla.

Todos voltearon a ver a Tsurugi.

—Umm…

Al ver que todos se voltearon a verla, Tsurugi se sonrojó un poco y habló.

—El Dios Supremo puede influenciar los mismos cimientos del mundo, y de esa forma, cuando corta su conexión con el mundo, una barrera se forma en el espacio entre ella y el mundo. Esa es la Ama-no-Iwato… es una manifestación del deseo del Dios Supremo para no ver nada más del mundo exterior y de no tener que lidiar más con este mundo.

—Es la mejor barrera formada por el poder del Dios Supremo. Por lo que, teóricamente, es imposible que los dioses de esta tierra puedan atravesarla. También es imposible saber lo que sucede dentro de ella desde afuera

Kagami continuó desde donde Tsurugi lo había dejado y suspiró.

—Aunque no podemos asegurarnos si la barrera se formó por voluntad de Sasami-san, y aunque posee el poder del Dios Supremo, todo lo que podemos decir es que es una señal de que el Dios Supremo ha abandonado su deber de mantener el mundo, y por lo tanto, existe el peligro de que se desencadenen problemáticas alteraciones que lleven este mundo al caos.

Problemáticas alteraciones como esta nevada antinatural…

—Debido a eso, estaría mintiendo si digo que no tengo curiosidad sobre lo que está haciendo Sasami-san en estos momentos… así que me gustaría atravesar la Ama-no-Iwato y ver su interior. No es inusual que Sasami-san se encierre en su habitación, pero si no cuida el mundo, podríamos esperar que una catástrofe suceda.

—Sasami-san dijo que solo necesitaba un descanso antes de regresar y por eso quería dejarla sola… pero nos sentimos bastantes solos sin ella.

Mi hermano murmuró y luego ladeó su cabeza hacía un lado.

—¿Pero la Ama-no-Iwato es su mejor barrera, ¿no? ¿Exactamente cómo planeas atravesarla para explorarla? Traté de entrar con mi bicicleta muchas veces, pero siempre golpeaba una pared invisible que me mandaba a volar…

—Sensei es un persona increíble para tratar de romper la Ama-no-Iwato con una bicicleta. Supongo que la ignorancia es felicidad… en cualquier caso, los métodos normales no le harán ningún rasguño a esa barrera.

Kagami se levantó de su asiento mientras continuaba hablando.

—¿Terminaron de comer? Si ya recuperaron sus energías, entonces me gustaría empezar de inmediato. Umm….

En un espectáculo de malos modales, Kagami se subió a la mesa.

—¡¿Qué?! ¡¿Qué está pasando?! ¡¿Kagami nos está diciendo que tendremos el interior de su falda como postre?! ¡Tan solo de pensarlo hace que mi corazón se estremezca! ¡Le agradezco a Dios por este festín!

—Nee-san, cállate. Chicos, por favor, suban a la mesa conmigo.

La voz de Kagami era muy fría y serena, por lo que todos subieron obedientemente a la mesa.

Por supuesto, la camarera se acercó para advertirles a estos groseros clientes que se bajaran de la mesa, pero Kagami la fulminó con la mirada. Tal vez estuvo involucrada una alteración, ya que en lugar de gritarles, la camarera simplemente les sonrió y se alejó.

—Sería problemático tratar de viajar por la nieve, por lo que me gustaría usar este espejo de agua como entrada para comenzar nuestra invasión en la Ama-no-Iwato.

Kagami apuntó a la piscina de agua en la mesa (el ‘espejo de agua’), el cual todavía mostraba la imagen de la ciudad.

—Será un viaje bastante violento, por lo que insisto en que se agarren bien para no separarnos.

—Síííí~~~~

Tama dio una respuesta animada y se aferró con fuerza al brazo de Kagami.

—…Sensei, tú también.

Kagami trató de actuar de manera casual y le extendió una mano hacía mi hermano.

—¡Entendido! —Mi hermano enérgicamente tomó su mano.

—Funyaa. —Kagami parecía estar satisfecha por alguna razón. Pero entonces…

—¿H-Hmmm? ¿Llegué demasiado tarde? ¿Qué debería hacer…?

Ambas manos de Kagami estaban ocupadas, por lo que Tsurugi no sabía que hacer.

—¡Tsurugi-nee, Tama tiene una mano libre!

Tratando de ser una buena chica, Tama le estiró la palma de su mano a su hermana mayor, quien se había quedado fuera,

—¡Gracias, Tama-chan! —Tsurugi sonrió y luego se agarró con fuerza al torso de Tama, sumergiéndose en su ropa mientras su respiración se volvía cada vez más y más irregular.

—¡¿Hyaaauuunnnn?!

Tama parecía sorprendida.

—¿Q-Qué pasa, Tsurugi-nee? ¿No nos vamos a tomar de las manos? ¡Kyahaha, eso hace coooosquilllas~~~! Ahhnnn… Tsurugi-nee, deja de moverte tanto bajo mi roooopa~~~….

—¡I-Increíble! Eres tan suave y calientita que… ¡parece que toda mi cara estuviera envuelta en amabilidad! ¡Tama-chan, en serio eres increíble! ¡Tienes la madurez y el atractivo sexual de una mujer adulta, pero toda la sensibilidad de una estudiante de primaria! ¡No esperaba que el cielo existiera tan cerca de mí!

—Nee-san, por favor cállate o muérete.

Tsurugi se retorcía bajo la ropa de Tama, sosteniendo sus dos bultos con su cabeza. Kagami la miró como si estuviera viendo basura.

Tsurugi apretó los puños con fuerza mientras suspiraba de pura felicidad.

—¡No te preocupes, Kagami-chan! ¡No tienes que estar tan celosa! ¡Estoy lo suficientemente cerca para proteger completamente el cuerpo extremadamente refinado de Kagami-chan!

—Nee-san, ¿por qué no has muerto? O más bien, ¿por qué sigues viva?

Tsurugi estiró una de sus manos codiciosas en busca de los pecho de Kagami mientras ella dejaba salir un suspiro de extrema resignación.

—Bueno, supongo que no es malo que tengas tanta energía. Comenzaremos nuestra invasión ahora, por favor, absténganse de hacer estupideces. Van a sentir que se están sumergiendo en el agua, por eso, cuando les dé la señal, cierren los ojos y contengan la respiración.

Kagami dio esas instrucciones y luego dio la orden.

El grupo se inclinó un poco, como si estuvieran a punto de saltar al pequeño charco de agua…

—Bueno, aquí vamos… una, dos, ¡tres!

————

¡Splash!


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